En la caída de la cascada de mil pensamientos, me precipito hacia el vacio de las ideas muertas que una vez tuve. Mi sonrisa me mira desde arriba los precipicios se abren ante mi. A veces me cuelgo en la liana de los tiempos muertos y viajo en busca de algo que ya ni recuerdo. Estoy en el techo de todos los agujeros.