He visto cómo alguien se daba de baja en su trabajo porque su novia le dejaba y no podía seguir... y me ha parecido raro, hasta inverosimil.
Después he empezado a pensar que me estoy perdiendo algo, que ya nunca pienso en dejar el trabajo, ni en ser una irresponsable, y si hace falta comer, trabajar y llorar a la vez pues se hace.
Estoy en un lugar del infinito que somos cada uno de nosotros en el que cualquier infierno mundano parece un cielo.
No le recomiendo a nadie ese lugar porque no está oscuro. Hay más claridad que en cualquier otro lugar del espacio-tiempo y eso es terrible para ese motor de seat seiscientos que tengo por cerebro.