Todos los desiertos florecen alguna vez. La belleza oculta tras el árido despertar, acurrucada al arrullo del sol y las estrellas, clama por salir. Y nadie puede detenerla cuando está decidida a arrasar con todas las lágrimas del universo. Irrumpe el manto de flores, demuestra lo bello en lo sencillo. Y te tienes que rendir. Contemplad la belleza y alimentad el alma.